19- DE NOVIEMBRE DE 1990
Un hombre de avanzada edad deambula por las calles de la gran ciudad, vodka y hambre son sus acompañantes de honor, busca un lugar para dormir, busca el calor que a olvidado su ser, nadie lo mira, la noche cubre su figura.
El cementerio solitario ,como el, le da la bienvenida con aires tormentosos, fríos y sofocantes, un alago en verdad para su sentir, una noche vaga, una noche sin mas novedad, una noche mas.
Tiempo muerto, aire seco y pulmones agonizantes, una cortina negra cubre al hombre, deambula en busca de una verdad que siempre supo, se sienta en una tumba, mira el nombre y sonríe.
Su pequeña risa retumba en el panteón, el nombre que a leído en ese mediocre mausoleo es el suyo, y un ataúd vació espera con ansias a su ocupante, lastima que este hombre deprimido aun quiera vivir, mañana regresara a sonreirle de nuevo a la muerte.
Un dia cansado y aburrido gritara -¨entierrenme mientras aun respiro, que muerto solo quiero descansar...¨
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