El desempleo lejos de ser una realidad se a convertido en la escusa perfecta de la ilegalidad, violando los derechos y libertades de millones de mexicanos, inconformes hartos y lamentablemente intimidados ante una mafia llamada el comercio informal.
El ambulantaje o comercio informal es una practica muy común en la ciudad de México, consta principalmente de puestos móviles fabricados con tubos de metal, aunque muchos otros son improvisados con cajas, otros mas robustos y pesados difíciles de mover sin ayuda de un vehículo.
El comercio informal esta presente en el fondo cultural de la sociedad mexicana, ya hasta es imposible pensar en la ciudad sin dejar de lado el colorido paisaje de ilegalidad y negocio.
Empecemos por puntos
-Sin importar clase social, estatus económico, o necesidad monetaria, el comercio callejero es ilegal, aunque existen permisos y regularizaciones muchos sindicatos se avalan de la carente revisión y seguimiento de los permisos ya expedidos, incrementando en desmedida y sin control alguno la cantidad de puestos.
-Los permisos proporcionados o no son examinados en el momento o no cuentan con un seguimiento, ya que muchos puestos ambulantes se dedican a la venta de productos ilegales como películas, cigarros pirata, pornografía, bebidas alcohólicas, maquinas de apuesta e incluso droga. A esta falta de dureza de los funcionarios al expedir permisos y a la presión de sindicatos se le suman mucho problemas de planeacion de espacios, regularización de mercancía y sobre todo la salubridad, la cual queda en segundo plano totalmente para cualquier dependencia del gobierno.
-Muchos si no es que todos los puestos abusan, olvidan que ganarse la vida no debe ser un aliciente para violar derechos de terceros, invadiendo la vía publica en desmedida, contaminando el entorno del transeúnte con ruido de baja calidad, imágenes sin nitidez, basura, estorbos como sillas, bancos, cajas, y muy por delante de todo la limpieza. La invasión del espacio publica a llegado a un punto en el que el reclamo de esta es motivo de agresiones fuertes por parte de la mayoría de comerciantes que lamentablemente solo saben expresarse con violencia.
El punto mas importante es al que yo llamo: ¨YA NO HAY NECESIDAD¨
Muchos iniciaron en el negocio de la informalidad por necesidad de un trabajo, pero las ganancias que el negocio del ambulantaje dejaba fueron claramente visibles, solo imaginémonos, invierten poco, no pagan luz, agua, renta, empleados, no pagan nada, todo es ganancia pura, mucho dinero con el mínimo de esfuerzo y riesgo, y lo que mas me enoja en lo personal es que la mayoría de personas que atiende estos negocios son jóvenes entre 17-30 años, capaces físicamente de encontrar un empleo en alguna fabrica o empresa.
Las ganancias con la mínima gota de sudor hacen que el ambulantaje sea el sueño dorado de cualquier flojo, es dinero rápido, sin esfuerzos, sin jefe, sin uniforme, sin reglas, sin ordenes, el empleo perfecto para el que odia esforzarse , manipulados y amparados por policías y funcionarios los ambulantes violentos, vulgares, sucios, fastidiosos han dejado de ser una forma de ganarse la vida, se han convertido en la manera mas productiva de no hacer nada mas que sentarse y revisar el celular, con cara apática te venden, como si ellos te hicieran un favor al recibir tu dinero, groseros e invasivos nuestros comerciantes cargan con una ley universal, aparentemente el requisito para poder vender en la calle: ¨DEBO CHINGAR AL PRÓJIMO PARA PODER COMER¨